Al parecer, todo son razones científicas, y si no te lo crees mira este vídeo.
Por lo tanto, puedo concluir que el hecho de que todas las canciones nos recuerden a Él se debe únicamente a nuestro cerebro y a nuestras hormonas.
Ya estoy mucho más tranquila.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario